viernes, 9 de diciembre de 2011

EL GOBIERNO RESUELTO A IGNORAR LA CRISIS

CFK sin ajuste ni cambios

Venimos señalando hace un tiempo que para develar el rumbo del gobierno es indispensable escuchar e interpretar los discursos de la presidente. Este exceso de discursos y de actos haría que incluso dentro del gobierno haya comentarios. Uno de éstos se lo adjudican a Julio de Vido, quien habría dicho: “la señora habla y habla y no gobierna, aunque a veces gobierna Máximo”.Tomando las definiciones que van surgiendo de la catarata de la retórica presidencial, se desprende que en realidad no está en los planes ningún ajuste en los términos clásicos de la palabra. Por tanto, la eliminación de los subsidios es sólo una forma de redireccionamiento de recursos a los sectores más desprotegidos o los más poderosos, como es el caso de la Cámara Argentina de la Construcción con el reciente anuncio de nuevos planes de obra pública. En efecto, hasta ahora la eliminación de subsidios a los servicios de electricidad, gas y agua se hizo con un bisturí, que con precisión va castigando a todos los barrios que votaron contra el gobierno en Capital y el cordón norte del conurbano, además de los countriesy edificios modernos con pileta, salas de fiestas y seguridad propia.
Está ya claro que lo que paguen esos usuarios no será un ahorro para las finanzas públicas, sino que irá a parar a la obra pública. Todos los que se hicieron ilusiones acerca de que el gasto público bajaría y que estaríamos ingresando en una era de racionalidad económica se equivocaron de cabo a rabo. En el resto de los hogares de Capital y el conurbano aún no está definida la quita de subsidios y se podría aplicar el criterio de que sólo los que ganen menos de 5.200 pesos seguirán teniendo subsidios.
Las cuentas siguen sin cerrar
Hablando en números, hasta ahora el Estado deja de aportar menos de 10.000 millones de pesos y, en caso de extender las quitas, la cifra no será mayor a los 20.000 millones de pesos de los 86.000 que se gastarán en subsidios en todo el año 2012, sin contar la importación de GNL para regasificar en Bahía Blanca y Escobar, que costará cerca de U$S 10.000 millones. Esto último se financiaría en parte con un cargo en las facturas de gas que está recurrido ante la justicia y que ya obtuvo amparos, por lo cual podría haber resistencias a su pago. Pero también hay que tener en cuenta que la justicia, hoy más que nunca, hace lo que el gobierno quiere.
Otra dificultad que tiene la Casa Rosada es la necesidad de U$S 5.700 millones para pagar los compromisos de deuda externa que, según el presupuesto 2012 que se aprobará el 14 próximo, saldrán de las reservas de libre disponibilidad del BCRA. Pero el problema es que ya no existen reservas de libre disponibilidad, gracias al drenaje de divisas de este año. Seguramente el Ejecutivo se las arreglará modificando la ley de presupuesto y la equivalencia entre base monetaria y reservas. De un modo u otro estamos ante jugadas de riesgo, ya que si bien la fuga de los depósitos en dólares se suspendió por el control de cambios de factoque impulso Guillermo Moreno, éste no permite que se paguen importaciones y obliga a parar exportaciones. Este manotazo puede durar hasta fin de año y es muy posible que en enero se acumulen los pagos de importaciones y los gastos en dólares de los argentinos en el exterior con las tarjetas de crédito, ante la imposibilidad de comprar dólares en el mercado local. Como ejemplo de esta realidad, en el comienzo de este fin de semana largo viajaron al Uruguay miles de argentinos, que formaron una cola de 14 kilómetros para ingresar por el puente de Gualeguaychú, aprovechando el dólar subsidiado con tarjeta de crédito. Y esto no pasa sólo con Uruguay, sino en los balnearios brasileños y chilenos, el Caribe, Miami y Nueva York. Por su parte, el turismo interno avaló la postura de Cristina en contra del ajuste, ya que se movilizaron más de dos millones de personas. Toda una muestra de que el consumo sigue de fiesta, como dice ella. Aunque sea por ahora, porque para el año que viene los pronósticos son sombríos.

UNA TORMENTA INESPERADA

La SIDE contra Matzkin

Cuando la semana pasada Daniel Scioli anunció que Hugo Matzkin reemplazaría a Juan Carlos Paggi como titular de la Policía de Buenos Aires, en medios oficiales se dio por descontado que el nuevo jefe reportaría políticamente a la Casa Rosada. El motivo era muy simple, Matzkin respondió históricamente al Ministro de Seguridad de Felipe Solá, León Arslanián, estrechamente ligado al cristinismo y abogado de varios funcionarios. Sin embargo, en pocos días se instaló un clima de hostilidad hacia Matzkin originado en el seno del gobierno nacional. La Ministra de Seguridad Nilda Garré anteayer elogio las gestiones en la seguridad bonaerense de Juan Pablo Cafiero y Arslanián pero lanzó una crítica que parece dirigida a Scioli y Matzkin: “Si se negocia sin tomar las riendas, se contribuye a la prostitución y a la corrupción”. Pero inmediatamente hubo una señal mucho más directa del ataque cristinista a Matzkin. Fue la difusión de un extenso informe -elaborado por la SI (ex SIDE)- sobre la trayectoria del polémico comisario. La agresividad del documento no deja dudas: Matzkin está bajo fuego.
¿SERÁ ÉSTE EL HOMBRE QUE LE ATA LAS MANOS A SCIOLI?
Informe reservado.- Un simple repaso sobre la carrera de Hugo Gabriel Matzkin, investigando, preguntando en las calles, y leyendo algo más que su legajo oficial, nos hace comprender la verdadera “experiencia” de este hombre. Matzkin comienza su actividad específica (antes era irrelevante) en el año 1997 ya siendo Oficial Inspector. Trabajaba en dependencia informal del entonces Subjefe de Policía “Pinocho” Lugos, para quien realizaba escuchas legales e ilegales. Fueron conocidas sus intervenciones de teléfonos desde Pinamar donde montó sus operaciones en el garaje de un chalet para monitorear las comunicaciones de sospechosos y otros miembros de la policía que trabajaban en la causa Cabezas. A partir del año 1999 incrementa en gran medida su capacidad técnica mediante el “apoderamiento” de equipos de escucha e intercepción telefónica del ex Área Especial de Inteligencia disuelta en esa instancia. La línea “Dura” o de “los Porongas” lo tiene como referente. En Septiembre de 2010, Néstor Kirchner, en el acto de clausura de un Seminario de Políticas Públicas, le pidió al Gobernador bonaerense, Daniel Scioli, que “no tenga miedo”y que “diga quién le ata las manos para no solucionar la inseguridad en provincia”. ¿Es Hugo Gabriel Matzkin, hoy Jefe de la Policía de la provincia de Buenos Aires, uno de esos hombres?
Como lo llaman sus propios subalternos, “el chancho blanco” Hugo Gabriel Matzkin, juró como nuevo jefe de la institución tras la renuncia de Juan Carlos Paggi, quien se despidió entre lágrimas de su función en la fuerza de seguridad, aduciendo “razones personales”, aunque con los bolsillos cargados, acotación que detallamos más adelante.”Estamos despidiendo a un gran hombre, policía de trabajo, de valores, que ha puesto lo mejor de sí”,remarcó el gobernador Daniel Scioli, quien encabezó el acto junto al “atornillado”Ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, entre otros. Asimismo, Scioli explicó que “en la vida se van cumpliendo etapas, y esta es una decisión que hemos tratado con Juan Carlos Paggi”, y adelantó que “en esta nueva etapa confiamos en un hombre con la experiencia de Hugo Matzkin, para seguir avanzando, para seguir acorralando el delito”.
Pero permítannos preguntarnos queridos lectores, y preguntarle al gobernador, ¿para seguir avanzando hacia donde? Un simple repaso sobre la carrera de Hugo Gabriel Matzkin, investigando, preguntando en las calles, y leyendo algo más que su legajo oficial, nos hace comprender la verdadera“experiencia” de este hombre.
Matzkin comienza su actividad específica (antes era irrelevante) en el año 1997 ya siendo Oficial Inspector. Trabajaba en dependencia informal del entonces Subjefe de Policía “Pinocho” Lugos, para quien realizaba escuchas legales e ilegales. Fueron conocidas sus intervenciones de teléfonos desde Pinamar donde montó sus operaciones en el garaje de un chalet para monitorear las comunicaciones de sospechosos y otros miembros de la policía que trabajaban en la causa Cabezas. A partir del año 1999 incrementa en gran medida su capacidad técnica mediante el “apoderamiento”de equipos de escucha e intercepción telefónica del ex Área Especial de Inteligencia disuelta en esa instancia. Alcanza reconocimiento a través del perfeccionamiento de un sistema de análisis de comunicaciones denominado VAIC Telemétrico que resultaba una versión mejorada del Sistema de análisis de las comunicaciones Excalibur de origen británico, comprado por la Provincia en el año 1997.
La línea “Dura” o de “los Porongas” lo tiene como referente. Suele trabajar en la actualidad con un grupo estrecho de colaboradores. Entre ellos el Comisario Inspector Figini, Abogado, el cual es su Secretario, y dos Subcomisarios: Diego Jiménez, que posee rango de Director, y el Capitán Juan Rossi, especialista en intervenciones telefónicas. El resto del personal suele rotarlo periódicamente, evitando especialmente trabajar con mujeres. Hace gala de sus relaciones, particularmente con Arslanián, quien pese a sus antecedentes de operaciones dudosas lo adoptó como asesor de su confianza. Hábil y mendaz, se lo reconoce como un hombre “sin códigos”. En ocasión de la fusión de Investigaciones e Inteligencia reunió a 30 funcionarios delegados y les comunicó que todo seguiría igual, con igual importancia de ambos organismos, cuando en “La Orden del Día”, del día anterior, se publicaba lo que finalmente y contrariamente sucedió: Investigaciones absorbió Inteligencia.
Pero, ¿cómo llega a ser referente entre “los Porongas”? Esto es un poco de esa historia:
En septiembre de 2005 trascendió internamente en la fuerza, que el grupo antisecuestro que manejaba el Crio. Hugo Matzkin y el Subcrio. “Pepe” Carballo (marido de una suboficial que estudiaba con el asesinado Beavious) estaba vigilando al Crio. Mario Naldi y a un grupo de oficiales en actividad, entre los cuales se encontraba el Crio. Insp. Daniel Brindo, 2do Jefe de la departamental La Matanza, también declarado prescindible por esos días. Desde la dirección general de seguridad, se había hecho circular el rumor que indicaba que Brindo fue pasado a retiro debido a que estaba involucrado en un caso de enriquecimiento ilícito, aunque su legajo permanecía impecable. Brindo se habría estado ocupando del caso Beauvais, conjuntamente con Naldi y otros funcionarios policiales, contradiciendo la orden que oportunamente emitiera el Crio. Gral. Seisdedos, que aclaraba que ese caso sería tratado como un caso pasional, y que aquel que investigara en otra línea vería terminar su carrera rápidamente. En aquel entonces, desde sectores allegados al desplazado Brindo, señalaban que Matzkin (ascendido a comisario mayor con escasos 21 años de servicio), era el mismo que con su segundo jefe quedaron involucrados en el escándalo que se tapó, consistente en ir a exigirle al marido de Patricia Nine una contribución de 100 mil dólares, para ellos por haber participado en el esclarecimiento de dicho secuestro.
Según información que habría sido hallada en el disco rígido secuestrado en la casa del comisario Beauvais, además de los jueces incluidos en la lista que recibían dinero del citado comisario, habrían estado también los nombres de distintos funcionarios policiales bonaerenses, incluido el Subsecretario de Seguridad de entonces, Arias Duval.
En Julio de 2008, el comentario más replicado paredes adentro del Ministerio de Seguridad bonaerense era que Matzkin habría concurrido a una reunión de altos mandos con una escucha telefónica (su especialidad y herramienta profesional) en la que podía escucharse al Superintendente Vargas hablando con subalternos, a quienes les indicaba que: “debían prepararse para el trabajo que les sobrevendría a futuro, ya que estaban hablando con el futuro Jefe de Policía”, en referencia a que sería el reemplazante de Daniel Salcedo. En dicha escucha también había críticas a la gestión del Ministro Stornelli. Matzkin corroboró una vez más la eficacia de sus “aparatitos”. En menos de 24 horas posteriores a dicha reunión, con la exhibición de la escucha ilegal, se produjo la silenciosa y rápida salida de Vargas “por razones personales”. Un mes después, en Agosto, Hugo Matzkin era reintegrado a la Policía Bonaerense.
Corría el mes de octubre de 2008 y Matzkin continuaba no sólo afianzándose sino que sumando amigos a la fuerza de seguridad provincial. El Crio. Daniel Fernández, que fuera desplazado de la Bonaerense durante la gestión de León Carlos Arslanián por estar involucrado en negocios incompatibles con su actividad, principalmente con agencias de seguridad y de control satelital de vehículos, fue nombrado en la dependencia del Ministerio que controlaba, justamente, a esas empresas. Fernández era socio Matzkin.
Para octubre de 2010, Hugo Matzkin era Superintendente de Investigaciones, pero mientras se desenvolvió en Inteligencia, criticaba el accionar de esa área, en ese entonces bajo las órdenes de Antonio Torreiras. Aparentemente, este último “encapsulaba” la información, sin dar participación a nadie, situación ésta que comenzó también a realizar Matzkin. La participación del Crio. Insp. Marcelo Chebriau en investigaciones de secuestros y piratería del asfalto, cuando fue criticado duramente por Matzkin por irregularidades en el desempeño de su función, vinculándolo a la piratería del asfalto, tráfico de estupefacientes, su relación con el Juez Federal Rodríguez y el padrinazgo de Mario “Chorizo” Rodríguez, sorprende cuando se observa su postulado como uno de sus “alfiles”.
Cuando Matzkin había sido pasado “a retiro” (a principios de la gestión Stornelli), “Pepe” Carballo habría tomado contacto con Mario Montoto para que interceda a través del gobernador Daniel Scioli y el Ministro Stornelli, para reingresarlo a la fuerza, situación que Matzkin habría olvidado. Sobre el fin de la gestión Stornelli, Matzkin se contactó con Mario “Chorizo”Rodríguez, para pedirle que le sugiriera al entonces Ministro la fusión de Inteligencia con Investigaciones y su designación como titular de las mismas, situación que fue convalidada por el Ministro. De ahí provendría el reacomodamiento de los ahijados de Rodríguez dentro del área de Investigaciones. Desde ese momento, Matzkin dio periodicidad a su contacto con Mario “Chorizo” Rodríguez.
Según datos que se desprendían de las calles en ese 2010, las DDI estaban recaudando entre 90 a 150 mil por mes dependiendo de la zona y los negocios, por supuesto. Donde había droga, subía notablemente la suma recaudada. Se calculaba que desde una villa como “la Korea” o la “del 18” se “ponía”a la comisaría (por ejemplo: Korea 40 mil pesos a la seccional José León Suárez) para que no molesten con las patrullas e incluso por avisar “algún ruido”. Desde esa misma villa se ponía otro tanto a la Brigada y a Narcotráfico. La “del 18” (del famoso “Mameluco”) “ponía” en su momento 18 a 20 mil en la seccional San Martín, también a la DDI, y a “narco” otro tanto. Todo esto, hablando de un solo “rubro” (droga), y sin calcular actualizaciones porque “todo subió”. La DDI de San Martín recaudaba aprox. entre 140 y 150 mil pesos por mes, suma en “bruto”, ya que de allí “sube” a la Superintendencia y se distribuye. Las departamentales tampoco se quedaban atrás, recaudaban entre 90 a 140 mil pesos. Todo depende siempre de cuantos punteros de droga importantes “laburen” en la zona, cuantos galpones de piratas, cuantos reducidores o cortes de autos haya en jurisdicción. Cuando Hugo Matzkin puso a Catalano como Jefe de automotores, se había cortado “la junta” de las plantas. Había que hacer “buena letra”. Luego, el mismo Catalano dio la orden de volver a recaudar para la corona, o sea, para el “Chancho Blanco”.
Cuando se reacomodaron las Superintendencias, una de ellas Seguridad Siniestral, se sabía que su titular iba a ser reemplazado no sólo porque era más antiguo que el Jefe Juan Carlos Paggi, sino que además porque nunca se había acercado a dejar “su parte”. Cabe destacar que Seguridad Siniestral abarca a bomberos y explosivos, donde se recauda una importante cartera mensual en lo que refiere a habilitaciones de comercios de todo tipo. Ejemplo contrario lo demostraba la Superintendencia de Delitos Complejos y Crimen Organizado (a cargo de Carballo), que si bien poseía un reducido circuito de recaudación, nunca dejaba de acercar “su parte” a la Jefatura policial (Paggi). Este hombre que días atrás agradecería tanto a Daniel Scioli y que se retirara entre lágrimas televisadas, estaba embolsando la módica suma de aproximadamente 600 mil pesos mensuales. En el ránking lo seguiría Baratta con 400 mil, Luego Matzkin con 300 mil, y Fernández (drogas) con 300 mil pesos.
Otro episodio que lo pinta de cuerpo entero al flamante Jefe de la Bonaerense, habla de que Stornelli se alejó de su “grupo original”cuando arreglo con Baratta y Matzkin el tema de la recaudación. Esto llevó irremediablemente a mentirle hasta al propio Daniel Scioli con las estadísticas, cosa que por otra parte, al servirle políticamente al Gobernador, no habría perdido el sueño por indagarlas. Por ejemplo, en los operativos de verano, se hablaba de éxito frente al delito frente a los números de Mar del Plata, Pinamar o Villa Gesel, pero nada se decía de los desastres que se permitían en el Partido de la Costa. Esto, afirman, era responsabilidad de Matzkin, quien le llenaba la cabeza y los bolsillos a Stornelli. La entonces denuncia del Ministro sobre un supuesto complot, casi antes de su “eyección” de su incursión en un cargo político, fue sustentada por Matzkin con datos falsos, para complicar la situación de otros “colegas” y sumar así poder y caja.
Como anécdota de esas épocas, se comentaba que la relación de Matzkin con Daniel Hadad era tal, que se demostraba al punto que el periodista de C5N, Pablo Kaplan, viajaba constantemente en el helicóptero de Stornelli. El entonces Ministro era quien le daba todas las primicias.
Algunas compras encargadas por Matzkin, de material de operaciones electrónicas, arrojaron dudas sobre sobreprecios aunque nunca se oficializó denuncia específica en su contra. Hace un par de años se operó de la vista, lo cual impidió, según malintencionados comentarios internos, que viera el helicóptero naranja desaparecido como el auto rojo de la familia Pomar.
Durante casi nueve meses fue separado de la actividad y destinado a la espera de destino luego de la “Masacre de Transradio”, lo que se consideraba su virtual pase a retiro (lugar donde se sospecha guardaba algunos “aparatitos”de su colección no declarada), no obstante fue reincorporado por el Ministro Casal como hombre de su confianza.
¿Pretenden hacernos sentir seguros y que creamos que vamos a estarlo cada día más porque hombres de “experiencia” quedan a cargo? ¿”Experiencia”en qué? ¿Alguna vez echarán a alguien, y nos dirán que era un inepto y corrupto en vez de esgrimirnos “razones personales”? En septiembre de 2010, el ex Presidente, en ese entonces Diputado Nacional y Presidente del Partido Justicialista, Néstor Kirchner, en el acto de clausura de un Seminario de Políticas Públicas, le pidió al Gobernador bonaerense, Daniel Scioli, que “no tenga miedo” y que “diga quién le ata las manos para no solucionar la inseguridad en provincia”. ¿Es Hugo Gabriel Matzkin, hoy Jefe de la Policía de la provincia de Buenos Aires, uno de esos hombres?