jueves, 14 de julio de 2011

Nilda Garré de Abal MEDINA de Funcionaria de Dictaduras Militares a Guerrillera Montonera y ahora a Ministro

Nilda Garré de Abal Medina: Ministro de Seguridad
Militante montonera y esposa de uno de los dos "ilustres" hermanos Abal Medina, dirigentes montoneros de origen Tacuara y JP.
Uno de los hermanos ejecutó de un tiro en el pecho al General Aramburu rematándolo con otro en la cabeza en abril de 1970, en tanto que el otro fusiló al Dr. Arturo Mor Roig en agosto de 1974.
En ambos casos, Nilda Garré sirvió de apoyo táctico-militar para el "ajusticiamiento en nombre del pueblo".
Lisa y llanamente cómplice de: dos secuestros y asesinatos
Los méritos de la Oficial Primera 'Comandante Teresa' (Garré) la llevaron a ocupar el ministerio que hoy dirige.
Se recibió de abogada en el año 1967, en la Universidad Del Salvador. Gracias a la amistad con María Borda logró ingresar como Asesora Política del Ministerio del Interior, jurando por los Estatutos de la Revolución Argentina y tomado por el súper católico doctor Borda (padre de María Borda) hombre fuerte de los militares.
Nilda ingresó con la categoría 24, la más alta del escalafón, que se equipara a Director Nacional (fantástico). Este trabajo fue durante la Dictadura del Teniente General Onganía y, posteriormente, de los Generales Levingston y Lanusse, causa por la cual no se sabe porqué el diputado Bonasso y un fiscal de la Nación no la acusan de colaboracionista.
Luego con Cámpora asumió como Diputada del Frejuli. Después vino la presidencia del General Perón e Isabelita manteniendo su cargo de Diputada y donde el Congreso votó por el famoso "Operativo Independencia", que ordenaba aniquilar la subversión en todo el territorio nacional.
El 24 de marzo de 1976, ya no figuraba en el Congreso, y sí, participaba en los montes tucumanos como parte de la guerrilla.
BENEFICIOS ECONOMICOS DE NILDA
Desde el punto de vista económico, cuando se restituyó la Democracia en el año 1983, por su "sacrificio" de haber participado en la lucha para la formación de una nueva patria Socialista
Cobró entre 400 y 600 mil dólares.
Aparte de eso, como ex funcionaria del Ministerio del Interior, de la Caja de Retiros de la Policía Federal
COBRA 4.485 dolares mensuales
Es propietaria actualmente dos (2) Registros de la Propiedad Automotor, obtenidos durante su colaboración con el gobierno de Carlos Menem. ¡Que lindo es ser una revolucionaria socialista con guita!...
Se estima que en cada registro automotor obtiene una ganancia que rondaría los 40.000 pesos mensuales.
O sea que, con su sueldo de MINISTRO SUPERARIA LOS $ 80.000 POR MES.

Segundo Prontuario Aníbal Fernández. Ministro. Ex Intendente Prófugo de Quilmes

Estuvo prófugo de la Ley a finales de octubre de 1994 por corrupción.
El diario "La Nación" del 27 de octubre de 1994 titulaba
"Siguen buscando al intendente quilmeño",
"La Prensa" del mismo día decía:
"Orden de captura para el intendente de Quilmes", y este escandaloso titular iba acompañado de una foto del entonces funcionario duhaldista en tiempos de Menem, Aníbal Fernández.
Cuando en octubre de 1994 le pidieron captura, Aníbal Fernández se hizo prófugo de la Justicia, permaneciendo escondido en una quinta que tenía en Florencio Varela. Reapareció una vez que la Cámara de Apelaciones le concedió el hábeas corpus que habían solicitado sus abogados, Federico Domínguez, Marcelo Ordoqui y María del Carmen Falbo, la actual procuradora de la Suprema Corte bonaerense.
Uno de los motivos de la causa era la corrupción administrativa, otro, la contratación de un estudio jurídico para negociar la deuda del municipio de Quilmes con la empresa Aguas Argentinas.
2. Acusado por Tráfico de Drogas
La Justicia halló en un procedimiento 1/2 kilo de cocaína de mediana pureza, así como una balanza de precisión y elementos para el fraccionamiento.

La droga y la balanza fueron encontrados entre miles de boletas de la Reforma Constitucional de la provincia de Buenos Aires, y que llevaban inscripta la opción "SÍ". Estas boletas, se supo, habían sobrado de la consulta popular que se realizara, a tal efecto, el día 2 de octubre de 1994.
Recordarán los memoriosos que tras esta Reforma de la Constitución bonaerense, estuvo el resonado caso de los sobornos que Eduardo Alberto Duhalde le ofreció a Aldo Rico y sus partidarios del MODIN (Movimiento por la Dignidad Nacional), para que Duhalde pudiera ser reelecto gobernador de la provincia de Buenos Aires por un período más. El hallazgo de la droga fue clave para emparentar a Aníbal Fernández con las drogas desde entonces.
Los elementos de precisión, la balanza y el medio kilo de cocaína, fueron encontrados en un local llamado "Estadio Chico", instalación que supo ser uno de los más famosos lugares donde tocaban bandas de rock, y que en los años 90 estaba en la agonía, como si fuera abandonado.
"Estadio Chico" hacía 3 años que funcionaba como local partidario de la Liga Federal, grupo político que llevó a Aníbal Fernández a la intendencia de Quilmes en 1991.

Antecedentes Delictivos de los "Próceres" que nos Gobiernan

Daniel Scioli - Gobernador de la Provincia de Buenos Aires y Karina Rabolini
1) Nunca pagó los US$ 200.000 de daños por la destrucción total del inmueble de su vecino del piso de arriba, el Sr. Maradan, de nacionalidad suiza. Scioli se declaró insolvente; mientras tanto mantiene un nivel de vida de magnate.
2) Karina Rabollini, su mujer, le debe más de US$ 2 millones al Banco de la Provincia de Buenos Aires (primer intento por armar una empresa de perfumes). La deuda (denunciada por Jorge Lanata) nunca fue cobrada y pasó a un fideicomiso que pagaremos entre todos.
3) El Banco Provincia de Buenos Aires le otorgó un nuevo crédito para otra empresa de perfumes que nuevamente está en proceso concursal.
4) Tuvo una hija extramatrimonial a la que no reconoció por 19 años. La madre de ella debió hacerle un juicio de filiación.Cuando el escándalo salió en la tapa de Revista Gente, “Ponscioli” finalmente reconoció supaternidad.
5) Quebró la empresa familiar, Casa Scioli de Electrodomésticos. Esto ocurrió en una época –los 90- donde las casas de electrodomésticos ganaron fortunas y se desarrollaron como nunca importando electrodomésticos a expensas de la industria nacional
6) Daniel Scioli tuvo dos procesos por contrabando.
7) Culpó de la quiebra y del contrabando a su propio padre para evitar dar explicaciones judiciales y hacerse cargo de su conducta. Sus acreedores nunca vieron un peso.

8) Gracias a sus vinculaciones con Menem (su Padre político) tuvo un millonario contrato con YPF, entonces estatal, como sponsor de su lancha. Al privatizarse YPF, la nueva titular –REPSOL- canceló estos millonarios contratos por ser Scioli un corredor absolutamente desconocido en el resto del mundo. Según los noticieros de canal 9 y canal 7, SCIOLI ganaba todas las carreras y todos los campeonatos mundiales. Todos los meses un nuevo campeonato mundial.

9) Scioli no figura en ningún ranking de campeones en categorías reconocidas. Es un absoluto desconocido fuera de Argentina.
Busque en la Web y verá que el único lugar donde figura “Scioli campeón del mundo” es en el curriculum oficial del susodicho.nLos campeonatos correspondían a categorías creadas ex profeso donde competía contra “partenaires” de relleno. La mayoría de estas categorías existieron sólo para la única carrera que le daba el tìtulo del mundo. Nunca más se repitieron.Mientras tanto justificaron los millonarios fondos que el Estado Nacional Peronista Menemista destinó como sponsor de la lancha “la Argentina”
En varias localidades ubicadas sobre el Paraná aún se recuerda como Scioli –invitado a participar en carreras regionales- salía 3ero ó 4to. Por la noche el periodista Enrique Moltoni (Noticiero Canal 9) presentaba “la victoria de SCIOLI”.La sorpresa de los lugareños, que esperaban el informe televisivo donde se mostrara a los “corredores locales” que le habían ganado al campeón del mundo, era mayúscula. Un solo ejemplo fácil de corroborar gracias a los miles de testigos venidos de todo el país: la carrera en “Reconquista” durante la “fiesta nacional del Surubí.
10) Funcionario de Menem, De la Rúa, Duhalde y del actual gobierno
Ejemplo de indignidad, como Presidente del senado bajó la cabeza mientras era humillado públicamente por la senadora Cristina Kirchner quien lo trató de ignorante.
Ejemplo de poca personalidad, como vicepresidente aceptó todo tipo de maltratos (públicos) que le prodigó Kirchner cada vez que osaba abrir la boca en un sentido que no gustaba al entonces Presidente (¿recuerda cuando lo dejaba en plantón y no lo recibía?).
Avala desde su cargo de gobernador millonarias transferencias de riqueza de su Provincia al poder central.Buenos Aires es la Provincia más castigada por la coparticipación y se ha convertido, segùn datos oficiales, en la mayor fábrica de pobres del país.Su ingreso per cápita, otrora el más alto del país, hoy cayó por debajo de la mitad en el ranking de Pcias.

Subsidios sin Control = Escasez e Inflación

La política de subsidios en la Argentina se transformó en un gigante cuyo apetito ya representa el 12% del gasto público total del Estado, algo así como $70.000 millones por año que equivalen al 3,7% del PBI.
Y alimentar al monstruo está diezmando el superávit comercial, comiéndose el saldo fiscal y generando mayores presiones inflacionarias por emisión monetaria y exceso de demanda.
El sostenimiento de precios considerablemente más bajos en la Argentina de servicios públicos, energía, transporte y combustibles a costa de fuertes inyecciones de gasto público y después de nueve años de fuerte crecimiento económico se está convirtiendo en un obstáculo cada vez más difícil de sortear y en la causa por la que hoy hay escasez por falta de inversión y más presiones inflacionarias. Así, lo que antes fue un acierto de política económica, que le permitió al país navegar con éxito la salida de la crisis, hoy se volvió un tumor cada vez más difícil de extirpar.
La política de subsidios en la Argentina se transformó en un gigante cuyo apetito ya representa el 12% del gasto público total del Estado, algo así como $70.000 millones por año que equivalen al 3,7% del PBI. Y alimentar al monstruo está diezmando el superávit comercial, comiéndose el saldo fiscal y generando mayores presiones inflacionarias por emisión monetaria y exceso de demanda.
Hija de la devaluación
La política de tarifas congeladas y subsidios por parte del Estado nació tras el estallido de la convertibilidad y la devaluación. En los primeros años post 2002, el congelamiento de tarifas primero y la compensación con subsidios después sirvieron como anclaje inflacionario. El tener la energía, el transporte público y los combustibles a precios congelados permitía mantener a raya los costos de producción de las empresas y darles cierto oxígeno a las familias que vieron cómo sus ingresos se devaluaron en términos de dólar.
Este anclaje de costos y salarios, sumado a una muy baja utilización de la capacidad instalada por parte de las empresas como consecuencia de una recesión que comenzó en 1998 y estalló recién en 2001-2002, hizo que el país empezara a crecer. Y que lo siguiera haciendo con los años a tasas cada vez más fuertes, aún a costa de más y más subsidios.
Pero Argentina se enamoró de los subsidios y el efecto inicial que estos tenían sobre el consumo. Así se fue inflando la demanda sin que la oferta, desincentivada por los controles de precios, fuera acompañando la tendencia con más inversiones.
El globo se fue inflando y como los posibles pequeños y graduales ajustes nunca llegaron, la bola de los subsidios se fue haciendo cada vez más y más grande. A la vez, como las empresas recibían más y más subsidios, su ecuación económica fue cambiando y vieron cómo su negocio no estaba en invertir para crecer sino en recibir más y más subsidios del Estado. Así se llegó a absurdos como el transporte de colectivos donde el Estado paga por kilómetro recorrido sin importar cuántos pasajeros viajan o que en la boleta de electricidad sobre un consumo promedio residencial de un usuario T1R2 de $120 por mes, $80 son subsidios y sólo se pagan $50.
Es por esto que la demanda sigue creciendo. El consumo eléctrico ha aumentado considerablemente en la última década. En 2003 el punto máximo de demanda fue de 14.359 MW a nivel país. Desde entonces, la marca creció cada vez con mayor velocidad hasta alcanzar los 21.024 MW del pasado jueves, un nuevo récord histórico de consumo. Este aumento se paga con más importación y gasto público.
Campo minado
El país siguió ignorando las distorsiones. Los subsidios crecieron vertiginosamente (principalmente por el mayor costo que tiene importar a precios internacionales naftas, gasoil, gas y fueloil) hasta representar este año más de US$20.000 millones, superando los $80.000 millones, equivalente al 13% del gasto público total
En 2001, en medio de la crisis, la partida de subsidios económicos era del 1,73% del PBI, equivalente a casi el 5% del gasto total. De esta manera, la mitad del aumento del gasto público que se produjo a partir de 2001, cuando ¬pasó del 35,65% al 43,19% en 2009 del PBI, se debe al crecimiento de los subsidios de las tarifas y otras compensaciones. Una magnitud que contrasta con el monto del 0,6% del producto que se destina al costo fiscal de la Asignación Universal por Hijo (AUH), que alcanza al 75% de los menores de edad pobres, según datos oficiales.
Una medida de la magnitud que hoy tiene el rubro energía y combustibles sobre el total importado por la Argentina (U$S2.885 millones, esto es un 108% más que los U$S1.390 millones de los primeros cinco meses de 2010) es observando el valor ingresado de combustible por cada dólar exportado. En los cinco primeros meses del año pasado, por cada dólar exportado de combustible, se importó U$S0,48, mientras que en el mismo periodo de este año, se importó U$S 1,11 por cada dólar exportado, pasando de ser exportadores netos de combustible a importadores netos, según datos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).
Y es esta magnitud la que genera distorsiones y efectos no deseados.
Tres efectos negativos
1- Deterioro fiscal: alimentar una demanda cada vez más creciente de gas, electricidad, combustibles en un contexto de precios bajos compensados por subsidios del Estado tiene un fuerte correlato fiscal. El Estado tiene que gastar cada vez más recursos para financiar un consumo que no está focalizado sólo en los que más lo necesitan sino que se han vuelto universales al punto tal que una vivienda de clase media o alta paga el gas natural varias veces más barato que una familia humilde que sólo puede acceder a una garrafa. Por eso, parte de la política de subsidios explica en consecuencia la mayor presión fiscal, el creciente gasto público y la emisión monetaria que se produce al estar pagando deuda pública y financiando gastos del Estado con reservas del Banco Central y con recursos de la Seguridad Social (Anses). Todo esto alienta las presiones inflacionarias.
2- Se reduce el superávit comercial: incentivar la demanda muy por encima de lo que ocurre con la oferte de energía y combustibles está lesionando otro de los pilares fuerte de la Argentina de los últimos años: el superávit comercial. En los primeros cinco meses del 2011 las exportaciones totales alcanzan los U$S32.100 millones, lo que marca un crecimiento del 24% en relación a igual período de 2010. Mientras que en igual período las importaciones alcanzaron los U$S27.332 millones, una suba del 39% en relación a los cinco primeros meses de 2010. Sólo la importación de combustibles y energía creció 108% en este período. Las mayores necesidades energéticas de la Argentina, sumada al incremento de precios internacionales del petróleo y derivados, hacen que cada vez el país deba gastar más dinero en importar naftas, gasoil, gas. Esto hace que la balanza comercial se deteriore.
3- Sin inversión y con demanda excesiva: el esquema actual de subsidios “desincentiva inversiones en energía” y, a la vez, “incentiva una demanda excesiva”. Esto deriva “en una insuficiencia del servicio, especialmente en electricidad y gas en determinadas épocas del año”. A esto se suma que las empresas de transporte o distribuidoras de gas y electricidad tienen tal dependencia de los subsidios que terminan siendo “semipúblicas”, destaca Marcelo Capello, del IERAL, el instituto dependiente de la Fundación Mediterránea, en una nota publicada por el diario Clarín. En este sentido, un informe del Equipo de Gestión Económica y Social (EGES) muestra que el mayor incentivo para las empresas ya no está en brindar mejor servicios a más pasajeros o usuarios, ya que reciben sus ganancias por los subsidios con independencia de a cuántos pasajeros transporten u hogares tengan conectados.
Pero el problema no es el diagnóstico sino cómo desactivar esta bomba de tiempo en una economía con alta inflación y deterioro fiscal. Ese es el debate pendiente y del que no se saldrá sin sacrificio

La Explotación PSEUDO PERONISTA KK al Pueblo que Realmente Trabaja

Un trabajador asalariado formal en la Argentina deberá trabajar entre 170 y 184 días para el Estado en el 2011 - Fuente: notiar.com.ar - Informe de Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf)
 
Según un informe privado, este año se necesitará trabajar entre 170 y 184 días sólo para cubrir impuestos.

La fuerte presión que ejerce el fisco nacional sobre los salarios de los trabajadores parece no tener límites. Un reciente informe privado destaca que en el corriente año un asalariado formal deberá trabajar entre 170 y 184 días sólo para pagar impuestos.
En el trabajo del Iaraf se analizó la carga tributaria legal a la que se enfrenta una familia asalariada en la Argentina tomando en consideración los impuestos más representativos que debe tributar a nivel nacional, provincial y municipal. Considerando que los ingresos económicos de las familias pueden tener como destino el consumo, el ahorro o el pago de impuestos, el objetivo del trabajo es contar con una estimación de qué porcentaje deja de percibir una familia por el hecho de existir diferentes tributos sobre los ingresos y el gasto.
En la metodología se definen cuatro grupos hipotéticos de familias con diferentes ingresos salariales y se estima, a partir de la estructura de alícuotas vigente para los distintos tributos, el monto total de impuestos que cada familia debería abonar.
La idea es tener una aproximación al ingreso disponible de las familias, sabiendo que el ingreso puede ser utilizado para el consumo (de bienes y servicios que también incluyen impuestos) o el ahorro.
La carga tributaria legal sobre el salario llega al 46%

Aumenta con el ingreso familiar. Este año resulta algo mayor que en el 2010, teniendo en cuenta que se opera en la formalidad.

Se puede observar que mientras la carga tributaria total varió, dependiendo del tramo de ingresos que se considere, entre un 46,4 y un 49,2% de los ingresos totales en el 2010, estos valores tuvieron un ligero incremento en el 2011, al pasar el rango a ubicarse entre un 46,4 y un 50,4%.
En relación con la carga tributaria de los impuestos al trabajo, el hecho de que los topes en los impuestos previsionales crecieran en menor medida que los salarios llevó a que en los últimos dos niveles de ingresos considerados la carga de los mismos como porcentaje del ingreso total se redujera en comparación con el 2010.
Por el contrario, en el 2011 se habría verificado un aumento de la carga del Impuesto a las Ganancias en los tres casos de mayores ingresos. Este incremento fue producto de la conjunción de un supuesto de subas salariales (30%) superior al aumento de los mínimos no imponibles del Impuesto a las Ganancias (20%). Como el primer caso hipotético no es alcanzado por este impuesto, no hubo variaciones entre ambos períodos.
Carga tributaria en el 2011
Se sigue advirtiendo una mayor progresividad en el caso de los impuestos directos, con una variación de la carga total de este tipo de tributos que va desde un 32,5% en el caso de las familias de menores ingresos hasta un 39,2% en el de las de mayores ingresos.
A diferencia de los impuestos directos, los tributos indirectos son caracterizados por una mayor regresividad, lo cual hace que sea mayor la carga en las familias de menores ingresos que en aquellas en las cuales éstos son más elevados (más del 13% para las primeras frente a alrededor del 10% en las segundas, para el 2011). El peso de los otros impuestos que podrían llamarse patrimoniales, como el Inmobiliario y el Automotor, aumenta a mayor ingreso de las familias.
En conjunto, considerando tanto la carga directa como la indirecta, no se advierten mayores diferencias entre los dos primeros tramos de ingreso considerados, puesto que la mayor progresividad de Ganancias (a mayor ingreso, mayor peso de los impuestos) se ve compensada por el hecho de que los impuestos al consumo, al ser generales, representan una menor participación en el total de ingresos de las familias a medida que se incrementa el ingreso. En los dos últimos tramos sí se advierte una mayor progresividad del sistema tributario en su conjunto.
Día de la liberación
Una medida tradicionalmente utilizada para cuantificar de manera visible para el público en general el impacto que tiene la carga tributaria es el "día de la liberación de impuestos" (DLI). Esto se realiza a los meros fines expositivos, puesto que el análisis no considera la carga fiscal neta, es decir, la manera en la que el Estado aplica a través del gasto los fondos obtenidos mediante la recaudación de impuestos.
El indicador DLI consiste en tomar como base de análisis un año calendario y calcular a partir de qué día un ciudadano deja de obtener ingresos que terminará enviando al Estado a través de los distintos tributos (cuando deja de "trabajar para el Estado" y comienza a percibir los ingresos para sí mismo). El análisis desde el punto de vista económico, como opuesto al meramente contable o legal, resulta útil puesto que la carga tributaria sobre el ingreso se dimensiona independientemente de si los tributos resultaron visibles o no, o aun si en algún momento los montos considerados pasaron por las manos del trabajador o no.
Para entenderlo fácilmente, el DLI sería hasta qué día del año se debe trabajar para cumplir con todos los impuestos que inciden económicamente sobre el ingreso. Según el presente estudio, un trabajador asalariado formal en la Argentina deberá trabajar entre 170 y 184 días para el Estado en el 2011, con lo cual el DLI se ubica entre el 19 de junio y el 3 de julio en función de cuáles sean los ingresos. El año pasado, el período estaba comprendido entre el 18 y el 29 de junio, es decir que se incrementó algo más la presión sobre las familias de mayores ingresos en los casos considerados.
Los supuestos utilizados en el análisis

Para la medición del impacto que tiene la carga tributaria legal en el ingreso familiar se consideró una familia tipo compuesta por cuatro miembros (matrimonio más dos hijos).
Se asumen cuatro casos de ingresos familiares de bolsillo (netos de aportes) hipotéticos, suponiendo que los mismos tendrán un aumento del 30% al cierre del 2011.
Se consideran tributos de los tres niveles de gobierno: nacional, provincial y municipal. En una de las infografías se detallan los tributos considerados.
Respecto de éstos, vale realizar algunas aclaraciones:
• En primer lugar, es importante destacar que los aportes personales y las contribuciones patronales se consideran como impuestos ya que el sueldo bruto de un empleado más las contribuciones a la seguridad social es el costo laboral que el empleador está dispuesto a pagar por los servicios de dicho trabajador y sería en definitiva el salario que estaría dispuesto a pagarle directamente en caso de no existir los impuestos al trabajo.
• Para los impuestos nacionales se ha considerado la estructura legal vigente para cada gravamen según surge del informe "Tributos vigentes en la República Argentina a nivel nacional" de la Dirección Nacional de Investigaciones y Análisis Fiscal.
• Para el análisis del Impuesto a los Ingresos Brutos que cobran las provincias y de la Tasa de Seguridad e Higiene que aplican los municipios se tomaron las alícuotas promedios de las principales provincias del país para el caso del Impuesto a los Ingresos Brutos y las alícuotas vigentes en la ciudad de Córdoba para el caso de la tasa municipal.
• Finalmente, para el caso de los impuestos Inmobiliario y Automotor se han considerado casos representativos de tributos a pagar en las principales ciudades del país.
Se supone que para el primer tramo de ingresos bajo estudio la familia alquila un departamento céntrico de dos dormitorios y no paga el impuesto Automotor. Para el segundo tramo de ingresos se asume que la familia alquila una vivienda en un barrio alejado del centro y que posee un automóvil chico usado.

En el tercer tramo la familia vive en un barrio de mayor poder adquisitivo y posee un auto mediano relativamente nuevo. Para el último tramo se consideró una vivienda en un barrio privado, con dos autos, uno mediano y uno chico.
En cuanto a los márgenes de ahorro considerados, para el primer tramo inferior es nulo y va aumentando para los superiores (es del 8, 16 y 20 del ingreso disponible respectivamente).
Por otro lado, si bien se consideran diferentes tramos de ingresos, se asume igual composición estructural de la canasta de bienes y servicios consumidos por las familias

El abuso permanente como institución kirchnerista

Es evidente que una muy considerable cantidad de ciudadanos de la Argentina tiene nociones sumamente borrosas acerca de lo que significan las instituciones políticas para el funcionamiento ordenado de una sociedad.
Muchos quizás hasta piensen que son el producto de las ocurrencias de un grupo de avezados gestores de grupos de interés (“corpos” en el argot neokirchnerista) a través de las cuales colonizan el Estado para convertirlo en lo que el incisivo pensamiento de Carlos Marx definía como “un comité ejecutivo para administrar los intereses de las clases dominantes en la sociedad.”
Aunque en este sentido no les falta algo de razón, lo cierto es que las instituciones son como la estructura que sostiene el edificio social, un conjunto de reglas que permiten la convivencia civilizada en un marco de cierto orden.
Manipularlas y tergiversarlas es la mejor manera de introducir en el cuerpo social la creencia en su inutilidad y la consecuente legitimación de la voluntad autoritaria de supuestos líderes providenciales que entonces se pone por encima de las instituciones.
Para quienes creen en que el respeto a las instituciones es la única garantía de estabilidad política ante esta situación nace la imperiosa necesidad de emprender su defensa, lo que no es otra cosa que lo que Ihering llamó “la lucha por el derecho”.
En los últimos días se han levantado -con mucha morosidad por cierto- voces indignadas por el uso indiscriminado que hace la señora H2cero de la cadena nacional de radiodifusión para hacer una supuestamente disimulada propaganda de los “éxitos” de su gobierno y por ende de su diferida candidatura a presidente.
Desde ya ello no resulta preocupante desde el punto de vista de su impacto propagandístico en la audiencia ya que las mediciones privadas acusan un apagado masivo de televisores cuando su imagen de engreída maestra ciruela aparece en la pantalla y su voz impostada y su discurso para orates torturan sin piedad la mente y los tímpanos del más taura, pero sirve para ejemplificar lo anterior respecto a cómo se utiliza un recurso que es de uso excepcional, para cocinar pucheros.
El artículo 75 de la nueva ley promovida por el kirchnerismo dice que “el poder ejecutivo nacional o los poderes ejecutivos provinciales podrán, en situaciones graves, excepcionales o de trascendencia institucional, disponer la integración de la cadena de radiodifusión nacional o provincial, según el caso, que será obligatoria para todos los licenciatarios”.
Situaciones “graves o excepcionales” según el propio gobierno, no hay, de modo que el único ítem aplicable es la “trascendencia institucional” del lanzamiento del programa “plasma para todos”, o de su candidatura a presidente, o de la irrespetuosa apología de su marido en el marco de una Fiesta Patria.
Que este abuso coloque a la hoy viuda alegre en una situación privilegiada frente a los demás competidores es secundario, lo realmente grave es que el abuso como conducta rutinaria consentida socialmente no tenga límites, y a su vez se haya convertido por su persistencia en una verdadera institución negativa y perversa capaz de corromper hasta los cimientos todo lo que la ciencia del hombre ha construido en pos de la convivencia.
En realidad, los que atropellan instituciones que costó siglos al hombre crear y mejorar y se ufanan de ello como la viuda y sus secuaces son bárbaros incapaces de entenderlas y de entender que como decía el maestro Ortega y Gasset son puro artificio que como tales pueden desaparecer y dejar al ser humano en medio de una jungla salvaje expuesto a la ley del más fuerte.

SE ALEJA EL 40% DE CFK

La inviable captación kirchnerista de los votos de Macri

Los encuestadores que fracasaron con los resultados del domingo pasado, lo hicieron sobre todo por no haber podido prever los 19 puntos de ventaja que separaron a Mauricio Macri de Daniel Filmus. Esta gigantesca diferencia no es un dato menor para el análisis del triunfo holgado de éste, que demostraría que una parte importante del voto ganador se dirigió a repudiar a CFK y su manejo arbitrario, monárquico y autoritario de las candidaturas, de las que excluyó al peronismo porteño y al sindicalismo.
Así es que parece quedar poco margen para sostener que votantes macristas puedan llegar a votar por CFK el 14 de agosto próximo. Más teniendo en cuenta los antecedentes del 2007: Macri ganó con el 46,7% contra el 23,6% de Filmus con el 67% de concurrencia, mientras que esta vez fue del 73%. En octubre de ese año, en las presidenciales, la lista de diputados y senadores del PRO obtuvo el 16% por no tener candidato presidencial, pero Elisa Carrió alcanzó el 22%, Lavagna 16,8% y Rodríguez Saá 7,7%. De ahí que no se advierte que entonces haya habido votos de Macri para Cristina presidente. Esto no quita que, con vistas a la segunda vuelta porteña, se produzcan jugadas tácticas inesperadas, como las declaraciones de María Eugenia Vidal, quien dijo ayer que podría pensar en votar a CFK en octubre.
Las comparaciones son odiosas
Los encuestadores fracasados -varios de ellos mercenarios de la ANSES- desarrollaron esta peregrina teoría basada en el consenso por el mejoramiento de la economía, las leyes de matrimonio igualitario y de medios audiovisuales y la gran efervescencia juvenil en favor del cristinismo que se vio en el velorio de Néstor Kirchner. A esto siguieron actos masivos posteriores en varias canchas de fútbol. En realidad, algo de razón tiene Filmus: sumó el 27,8%, es decir, 4 puntos más que en 2007, pero esa vez no había un candidato semioficialista como Jorge Telerman. Así, debemos concluir que los votos del cristinismo para la presidencial estarían en la Capital en el orden del 30%. Pero también pueden afectar el papelón de Filmus diciendo que ganó y la prolongación del escándalo Schoklender-Bonafini, que no tiene fin cierto. En el 2007, pese al 23% del FpV en Capital, una cifra igual en Córdoba, un 38% en Santa Fe el 46% en Buenos Aires, el 60% en Mendoza y un número similar en Entre Ríos, finalmente Cristina ganó con el 45%.
Pero desde entonces Mendoza y Entre Ríos cambiaron, al igual que Santa Fe, porque el conflicto de la 125 hizo que el voto del campo se polarizara contra el gobierno. Lo mismo vale para el 40% de los votos del interior de Buenos Aires que representan al agro. Entonces va quedando una sola alternativa para alcanzar el 41%: que CFK y Scioli obtengan el 50% en el conurbano. Sin embargo, en Malvinas, ubicada en el segundo y tercer cordón, CFK registra 42% y Scioli, 37%. Esta situación puntual, si expresa el promedio de todo el conurbano, la bajaría a la presidente por debajo de la línea del 40%. Esto conlleva el riesgo, para el 14 de agosto, de no conseguir el mágico 40%. Todo esto si es que la corrupción generalizada no hace mella en una franja de los votantes del gobierno.
Hay pocas dudas de que Daniel Scioli será gobernador cuatro años más, pero también de que, en una segunda vuelta, Cristina tiene serias chances de perder.

EL GOBIERNO ANTE LA AMENAZA DEL PACTO DEL 15 DE AGOSTO

Moyanistas y kirchneristas porteños sabotearon a Filmus

Se tensa la cuerda

No hay nada más peligroso para quienes se dedican a la política que la confusión que impide tomar decisiones. No hay peor consejera, en los momentos de crisis, que la duda y la sensación de estar parado sobre un tembladeral legítimo y recurrente. Eso es lo que le sucede a Cristina Fernández de Kirchner, a quien parece que el mundo se le derrumbó después del traspié electoral del domingo último. Tan es así, que el mar de rumores que avanza sobre el gobierno no responde a una acción psicológica ni a malas intensiones premeditadas, sino que expresa una realidad que amenaza con convertirse en incontenible. Una demostración simple y menor -ya iremos a las más importantes pese al vértigo que las modifica minuto a minuto- es el confuso episodio que rodeó al incendio y destrucción intencional de dos kioscos de venta de diarios ubicados en el Mercado de Concentración de Frutos, a los que se les “sugirió”que no vendieran más el matutino Clarín, que allí registra un alto nivel de circulación. Ante la negativa de los kiosqueros, manos anónimas, aunque no tanto, cometieron ese delito. Por tratarse de un ámbito donde los secretos prácticamente no existen, todas las miradas convergieron sobre la Secretaría de Comercio Interior y, en consecuencia, comenzó a circular el nombre de su titular, Guillermo Moreno, y, como suele suceder en estos casos, a tratar de restringirse la información sobre lo sucedido, pese a que de una u otra manera se involucró a un diario.
Simultáneamente, mientras las noticias van y vienen sobre diferencias internas protagonizadas por dos altos funcionarios -como ayer lo dio a conocer esta hoja-, otras diferencias serían más notables. Por ejemplo, en medios que tienen motivos para conocer de estas cosas, se dice que ahora Horacio Verbitsky medita acerca de la conveniencia de exponerse en la cúspide del poder como lo hizo a lo largo de la trayectoria del kirchnerismo y, como quien deshoja una margarita en silencio y sin suspiros, prepararía no sólo una retirada disimulada al comienzo y más explícita después. En tal sentido, algunas fuentes creen encontrar una explicación en la gaffeocurrida hace unas horas por el pequeño pasquín Página 12 que él controla, al consignar las declaraciones de Fito Páez, que no ahorró calificativos para demostrar su disgusto por las elecciones que le dieron el triunfo al PRO. Un hombre de la frialdad y experiencia de Verbitsky no podía -ni puede- ignorar el resultado adverso que producirían las palabras del colega musical de Amado Boudou, tal como quedó registrado en diarios, revistas, programas televisivos y radiales. Incluso, elementos representativos de la izquierda resolvieron censurar a Páez, lo que es toda una señal acerca de lo que podría suceder el próximo 31 cuando se produzca la segunda vuelta.
En tal sentido, las versiones indicativas de una posible suspensión de esos comicios tienen su asidero, pese al capricho que dio un tono agudo a la respuesta negativa de la Presidente cuando se le hizo la consulta. Así, parecería que el ideologismo mantendrá a rajatabla la decisión de exponerse a un verdadero terremoto electoral que seguramente estará precedido por otro en una provincia tan importante como Santa Fe, donde Miguel del Sel ya tendría asegurado el segundo puesto y con serias posibilidades de ponerse en situación para aspirar a la gobernación. De todos modos, Santa Fe es otro distrito que ya se aleja del gobierno central, sea a través de este candidato o del socialismo. Concurrentemente, se afianza la perspectiva de resultados similares, aunque con otros rótulos o tal vez peores por aquello de que no hay peor astilla que la del mismo palo, como sucederá en Córdoba, donde han vuelto a fracasar las consultas con el rebelde De la Sota.
Pero lo peor, lo más peligroso para el oficialismo y hasta sorprendente para todos, es el caso de la provincia de Buenos Aires -dicho sea de paso, el primer distrito electoral del país-, donde el silencio de Daniel Scioli se hace cada vez más pesado. Enigmático para algunos, significativo para otros e importante para todos los analistas que, pese a los sobrados antecedentes del comportamiento político del gobernador, aprecian con fundamento que son algo más que una sospecha los contactos que mantiene con quien parece dibujarse como el candidato de mayor expectativa nacional: Eduardo Alberto Duhalde. Ya es un secreto a voces que los intendentes del conurbano y que aquellos que mejor representan al peronismo ortodoxo están más que disgustados con la Casa Rosada por la discrecionalidad del dedo de Cristina para elegir candidatos, con el agravante que se profundizaron las viejas heridas abiertas por la izquierda de los años setenta, que ha vuelto de la mano de viejos nombres como Dante Gullo, Carlos Zannini, Carlos Parrilli, Carlos Kunkel y otros pocos que se destacaron por los hechos dolorosos de esa época. Y ha sucedido algo peor que no por conocido y reiterado debe repetirse: la irrupción en la escena de jóvenes prácticamente desconocidos que aparecen en puestos que los pusieron en carrera política. Dejemos de lado por un momento la rentabilidad que les produce esta verdadera aventura y digamos que la izquierda tiene esas cosas que la muestran como renuente a aceptar un rechazo popular. Es la izquierda teórica, que cree que, por la sola circunstancia de serlo, puede aspirar a lograr un obligado respaldo mayoritario pese a que todos los indicadores muestran que, en los más diversos niveles de expresión, el argentino medio aspira a que rija un sistema de orden, seguridad y con posibilidades de progresar. Nada más alejado de las ideas socialistas.
Ahora que Hugo Chávez promete abandonar la escena activa, Cristina ha perdido su inspiración continental, pese a que el Foro de San Pablo posee un proyecto de amplitud regional, la marcha del mundo avanza en sentido contrario. Aunque ella no se dé cuenta, estos son los componentes simples del escenario, simples, repetimos, pero suficientes para prometer un rotundo y estrepitoso fracaso si se sigue el rumbo por el que avanza el nunca bien definido modelo kirchnerista. Además, hay problemas más específicos que hacen a la vida cotidiana. Ya nadie ignora el malestar que por múltiples razones existe en las fuerzas policiales, con su correlato de inseguridad amparada legalmente, lo que hace que el terreno sea cada vez más pantanoso. Ahora se incorpora a este panorama el malestar que ha surgido en la Prefectura Naval, una de las Fuerzas elegidas para apoyarse frente a cualquier contingencia. Podríamos añadir más elementos para esta alarma que se ha instalado y amplía en el terreno electoral y así, comentar, por ejemplo, el escandaloso crecimiento del narcotráfico, de la corrupción y de los errores administrativos de los que parece formar parte una idea peligrosa que no se soslaya en las nerviosas conversaciones que se mantienen en la Rosada y en Olivos: aplicar una progresiva firmeza sobre la oposición, sobre cualquier oposición, y confundir a sus factores en uno solo que, a la inversa de lo buscado, hará desbordar las urnas en octubre. Esa idea sería, por ejemplo, la que ha llevado a generar presiones sobre un militar uruguayo con prisión domiciliaria y seriamente enfermo, profundizar las incomodidades a militares argentinos presos en Bahía Blanca en condiciones que hasta los mismos jueces reconocen de hecho, perseguir abiertamente las disidencias periodísticas y otras lindezas que apuntan a la conformación de un Estado policial en plena campaña política. Saquemos las conclusiones.